Seguir con hambre siempreSeguir con hambre siempre

Seguir con hambre siempre

El proceso de hambre o saciedad

El proceso del hambre o saciedad está influenciado por muchos factores y es complejo; los más importantes son:

  • Niveles de glucosa en la sangre
  • Señales del intestino cuando está lleno o vacío 
  • Liberación de sustancias mensajeras en diferentes partes del cuerpo (cerebro, grasa, digestivo) en respuesta a situaciones de saciedad o hambruna
Seguir con hambre siempre
Seguir con hambre siempre

Regulación del hambre

El hambre está regulado hormonalmente y se divide en dos vías principales: la vía homeostática y la vía hedónica.

  1. Vía homeostática es la respuesta biológica al hambre, impulsada por la necesidad de obtener energía en forma de calorías.
  2. Vía hedónica se basa en el placer y utiliza estímulos emocionales para «ignorar» las señales físicas de hambre o saciedad. El comer emocional se encuentra dentro de la vía hedónica.

Factores

Existen varios factores que pueden afectar la regulación fisiológica del apetito, ellos son:

  • Trastornos del sueño.
  • Altos niveles de estrés.
  • Obesidad.
  • Diabetes.
  • Síndrome de ovario poliquístico.
  • Resistencia a la insulina.
  • Inflamación.
  • Alteraciones hormonales
  • Trastornos de salud mental pueden afectar los niveles de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, lo cual también puede ocasionar modificaciones en el apetito.

Hormonas que intervienen en el Hambre 

Cada vez se conocen más sustancias implicadas, las más conocidas son:

Grelina, hormona del apetito

Es secretada por el estómago cuando está vacío y produce la sensación de hambre, el aumento de peso y la reserva de grasas.

Leptina

Hormona sintetizada por los adipocitos (células de la grasa) que se libera en la sangre cuando aumenta la cantidad de grasa de reserva almacenada e informa al hipotálamo que hay suficientes reservas y reduce el apetito.

El equilibrio entre estas señales y otras muchas aún no descubiertas hace que la sensación de hambre sea un instinto primario bastante más complejo en realidad.

Los científicos sueñan con llegar algún día a regular este equilibrio hormonal con medicamentos, pero de momento, lo que se sabe es que no se adelgaza por comer poco y nada más, hay que hacer ejercicio, conocer el cuerpo y sus limitaciones (la genética influye mucho y una persona de 100 kilos no va a llegar a pesar menos de 60 kg sin perder la salud) y probar diferentes estrategias nutricionales saludables.

Cada vez está más claro, para mantener o perder peso hay que escoger alimentos bajos en calorías pero que no dejen sensación de hambre, porque en cuanto se pasa hambre, el cuerpo pone en marcha mecanismos para mantener el peso y se deja de adelgazar.

Tipos de hambre

Seguir con hambre siempre

Alimentos recomendados para ‘estar llenos’

Los alimentos que llenan el estómago por su alto contenido en agua y/o fibra son:

  • Productos integrales
  • Legumbres
  • Frutas
  • Verduras
  • Comidas copiosas que llenan el plato pero son bajas en calorías, como las sopas con poca grasa y las ensaladas.
Comidas copiosas
Comidas copiosas

Los alimentos mencionados envían rápidamente la señal de saciedad desde el estómago al cerebro y tardan más tiempo en digerirse, prolongando la sensación de ‘estar llenos’ y evitando los picoteos.

mango salsa guacamole hummus appetizers tray food snack 602347 11zon

La culpa

El círculo de la culpa en los trastornos alimenticios:

Seguir con hambre siempre

Escala Power of Food Scale

Una forma de investigar la alimentación hedónica es usar la escala: Power of Food Scale; Escala del poder de los alimentos. Los estudios de resonancia magnética funcional muestran que las personas con lecturas más altas en la escala Power of Food Scale tienen más actividad cerebral en la corteza visual cuando ven alimentos muy sabrosos. Si bien se necesitan más estudios para comprender mejor las implicaciones clínicas de este hallazgo, es otro indicador más de que comer «emocionalmente» no es solo emocional. También es fisiológico.

Temas relacionados  Medicamentos para tratar la depresión y la ansiedad
Escala Power of Food Scale
Escala Power of Food Scale

La escala Power of Food (PFS) se desarrolló para evaluar el hambre hedónica, o cómo piensan y sienten las personas acerca de los alimentos y el comer en ausencia de una necesidad metabólica.

«Como profesionales de la salud, el primer paso para ayudar a un paciente que lucha con el comer emocional es escuchar con empatía y luego evaluar cualquier causa fisiológica que pueda estar presente».

7 tipos de hambre

La frase «7 tipos de hambre» se refiere a la idea de que el hambre no es una sensación única, sino que puede manifestarse de diferentes maneras según la fuente o la necesidad específica del cuerpo y la mente.

Estos tipos de hambre incluyen hambre visual (provocada por la vista de alimentos), hambre olfativa (desencadenada por el olor), hambre emocional (relacionada con emociones y estados de ánimo), hambre de boca (por la necesidad de sabor o textura), hambre de estómago (la verdadera necesidad física de comida), hambre celular (cuando el cuerpo necesita nutrientes específicos) y hambre mental (impulsada por pensamientos y recuerdos).

Reconocer estos distintos tipos de hambre puede ayudar a las personas a entender mejor sus impulsos alimenticios y a tomar decisiones más conscientes sobre su dieta y bienestar.

Apetito y Hambre

El apetito es el deseo de comer alimentos, generalmente influenciado por factores psicológicos, emocionales y sensoriales, más que por la verdadera necesidad física de nutrientes. A diferencia del hambre, que es una señal fisiológica del cuerpo que indica la necesidad de energía, el apetito puede surgir incluso cuando el cuerpo no necesita alimentos.

El apetito puede ser desencadenado por el entorno, como ver o oler comida, o por emociones como el estrés o la tristeza. Controlar el apetito es clave para mantener una dieta equilibrada y evitar el consumo excesivo de alimentos, lo que puede llevar a problemas de salud como la obesidad.

El hambre es una sensación física que indica la necesidad de ingerir alimentos para proporcionar energía al cuerpo. Esta sensación es el resultado de la baja en los niveles de glucosa en sangre y es regulada por hormonas como la grelina, que envían señales al cerebro para que busque alimentos.

El hambre se diferencia del apetito en que es una necesidad fisiológica, mientras que el apetito es más bien un deseo psicológico. Comprender y responder adecuadamente al hambre ayuda a las personas a mantener un equilibrio energético y a satisfacer sus necesidades nutricionales de manera efectiva.

Seguir con hambre siempre


Información del autor
  1. Enfermeria Buenos Aires
  2. Lorena Plazas, licenciada en enfermería. Trabajo propio
  3. https://pxhere.com/es/photos

Última actualización: [30/08/2024]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *