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¿Por qué lo psicodélico para la depresión?
Existe una creciente interés por parte de las personas en los psicodélicos clásicos como potenciales tratamientos para diversas afecciones de salud mental, entre las que se incluyen:
- Angustia en etapas terminales.
- Ansiedad.
- Depresión resistente al tratamiento
- TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo).
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT).
- Trastorno depresivo mayor.
- Trastornos por consumo de sustancias.
- Trastorno por consumo de alcohol.
- Trastorno por consumo de tabaco.
Psilocibina
La psilocibina, un psicodélico clásico, ha demostrado resultados prometedores al generar efectos terapéuticos positivos en un entorno controlado. Aquellas personas que consumen psilocibina suelen experimentar una comprensión profunda de diversos aspectos de sus vidas, relaciones y fuentes de significado.
Estas experiencias les permiten reflexionar sobre su identidad y cómo ha influido en el curso de sus vidas. “Ese tipo de experiencia es un componente importante del tratamiento de las personas con depresión”. Benjamin Lewis, MD , director de la Clínica de psicoterapia asistida por ketamina (KAP) en la Clínica de salud conductual de Park City de la Universidad de Utah Health y profesor asistente de psiquiatría en el Instituto de salud mental Huntsman.
La psilocibina es actualmente un medicamento de la Lista I y no está aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos para uso clínico.
¿Cómo sería el tratamiento con psilocibina?
La administración de psilocibina requiere una preparación psicoterapéutica exhaustiva antes de consumir la sustancia. Este proceso implica recibir apoyo durante una sesión de ocho horas con la presencia constante de dos terapeutas. Posteriormente, tanto los terapeutas como el paciente participarían en sesiones de integración que exploran cómo aplicar esas experiencias a la vida del paciente.
“No se trata simplemente de tomar una pastilla o una sustancia para tratar los síntomas”, explica Lewis. “Es un enfoque terapéutico completo, con intenciones detrás de él y el respaldo necesario para abordarlo de manera terapéutica”.
Lewis destaca que, debido a problemas legales, falta de datos y la necesidad de investigaciones en curso, actualmente no recomendaría la psilocibina como opción para los pacientes.
¿Qué efectos secundarios produce la psilocibina?
Los efectos secundarios de la psilocibina pueden ser leves o intensos. Los síntomas leves incluyen:
- Ansiedad.
- Cambios en la temperatura corporal.
- Desorientación.
- Dolor de cabeza.
- Elevación de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
- Náuseas.
- Paranoia.
¿A qué llamamos psicodélico?
El término “psicodélico” se utiliza para describir sustancias, experiencias o arte que producen efectos perceptuales y cognitivos intensos y alterados. El término proviene de las palabras griegas “psyche” (mente) y “deloun” (revelar), lo que se traduce aproximadamente como “revelar la mente” o “manifestar la mente”.
Los psicodélicos son sustancias que alteran la conciencia y producen efectos sensoriales y perceptuales distintos. Entre las más conocidas se encuentran:
- Alucinógenos clásicos como el LSD (dietilamida del ácido lisérgico).
- Psilocibina (presente en los hongos alucinógenos).
- Mescalina (encontrada en el peyote y el cactus de San Pedro).
Los psicodélicos inducen a experiencias profundamente transformadoras, como:
- Cambios en la percepción del tiempo, colores y formas vívidas.
- Intensificación de las emociones.
- Conexiones inusuales entre ideas y conceptos.
Estas experiencias suelen ser subjetivas y varían según el individuo y la dosis utilizada.
¿Qué producen los alucinógenos?
Los alucinógenos, también conocidos como psicodélicos, producen una amplia gama de efectos en la mente y la percepción. Estos efectos pueden variar según la sustancia específica y la dosis utilizada, así como las características individuales de cada persona. Algunos de los efectos más comunes de los alucinógenos incluyen:
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Alucinaciones visuales: pueden provocar la percepción de imágenes, colores, luces y patrones que no están presentes en la realidad. Estas alucinaciones pueden ser coloridas, vibrantes y altamente detalladas.
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Alteraciones en la percepción del tiempo y del espacio: pueden distorsionar la forma en que una persona percibe el tiempo, haciendo que parezca que pasa más rápido o más lento de lo normal. También pueden afectar la percepción del espacio, haciendo que los objetos parezcan distorsionados o cambien de forma.
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Cambios en la cognición y el pensamiento: pueden alterar la forma en que una persona piensa y procesa la información. Pueden llevar a la aparición de pensamientos y conexiones inusuales, así como a una mayor creatividad y fluidez mental.
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Cambios en el estado de ánimo y las emociones: pueden intensificar las emociones y los estados de ánimo existentes, tanto positivos como negativos. Pueden provocar sentimientos de euforia, alegría, empatía y conexión emocional, pero también pueden desencadenar ansiedad, miedo o confusión.
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Experiencias espirituales o trascendentales: muchas personas informan que los alucinógenos les brindan experiencias profundas y significativas, que pueden estar asociadas con lo espiritual, lo trascendental o lo místico. Estas experiencias pueden incluir sentimientos de unidad con el universo, conexiones con lo divino o una mayor comprensión de la existencia.
Arte psicodélico
Además de las sustancias, el término “psicodélico” también se aplica a diversas formas de arte, música y expresión creativa que buscan evocar experiencias similares a las experimentadas con sustancias psicodélicas. Esto puede incluir obras visuales y musicales que juegan con patrones, colores y estructuras para crear una experiencia visual o auditiva única y expansiva.
Es importante destacar que los efectos de los alucinógenos pueden ser impredecibles y varían de una persona a otra. Además, su uso conlleva riesgos y es necesario tener precaución como informarse adecuadamente sobre las sustancias y sus efectos antes de considerar su consumo.
Fuentes consultadas
Última actualización: [25/05/2023]